Presentación de Reset y Mierda en mis tacones con Anabel Botella

¡Buenas noches!

Ya ha pasado el lunes, ese día que todo el mundo odiamos. Empezar la semana siempre suele costarme un poco, pero, por suerte, a mí aún me dura el buen rollo del viernes por la tarde. Ahora que ya ha pasado todo puedo contaros con un poco más de perspectiva la experiencia de la primera presentación conjunta de Reset y Mierda en mis tacones. Aprovecho para agradecer la cantidad de fotos que nos hicieron y que voy a aprovechar para compartir también aquí. 

Llevaba unas semanas de locos, con la casa llena de recortes, pegamento y mini portadas de mis libros. Imprimiendo, recortando, pegando. He tenido mucha ayuda, eso sí, porque mis padres y mi novio no han dejado de ayudarme. Como bien dijo mi hermano en la presentación, he tenido mi propio taller clandestino.

Quizás el haber estado tan ocupada me sirvió para no pensar tanto en lo que me esperaba el viernes, aunque cuando ya quedaban un par de días ya fue imposible no pensarlo a cada momento.

No soy una persona a la que le encante hablar en público. Quienes me conocen bien, saben lo nerviosa que me pongo (en especial en los momentos previos) y que eso se traduce en que hablo por los codos. 

Sin embargo, el viernes me sentí a gusto entre familiares y amigos, por lo que una vez sentada en ese taburete, y con todos preparados para escucharnos a Anabel y a mí, puedo decir que empecé a relajarme (un poquito).

Disfruté muchísimo con Anabel, pues es una persona cercana y amable que te hace sentir arropada y siempre tiene una sonrisa en los labios. Cuando se me presentó la oportunidad de que ella me presentara, no dudé en aprovecharla. Es una escritora a la que admiro y, además, como os digo, es un encanto de persona. 

Debo añadir que sus preguntas me gustaron mucho, me hicieron reflexionar sobre mis personajes y sus historias. No se limitó a hacerme preguntas sin más, sino que fue una charla que a mí se me hizo muy amena. Espero que al resto también. Hablamos de las novelas, sus personajes, de próximos proyectos y de la forma de organizarnos a la hora de escribir.

Fue un gustazo ver a todo el mundo, recibir el cariño y el apoyo de todos, verlos atentos e interesados en lo que decíamos. Gracias por acompañarnos y por los aplausos al terminar.

Hubo risas, abrazos, firmas, fotos y piruletas. Me encantó ver a la gente con los corazones rojos y azules pintando sus bocas, en serio. Y es que preparé unos detallitos para cada asistente: una bolsita con dos piruletas de corazón y dos minilibros de Reset y Mierda en mis tacones, en cuyo interior se podían leer los prefacios. Parece que el regalito les gustó, así que yo feliz también por eso.

Si queréis ver cómo fue, podéis ver el vídeo de la presentación aquí

En definitiva, fue una tarde increíble rodeada de personas geniales. Algo que llevaba tiempo queriendo hacer y que me hacía mucha ilusión. Así que, de verdad, de corazón, millones de gracias a todos los que me acompañasteis en algo tan especial. A mi novio y a mi familia, que son los que más me sufren pero los que se tiran de cabeza conmigo a cada una de mis locuras, a los viejos amigos, a los nuevos también. Gracias a Escarlata Ediciones por su confianza, a José Luis de Bibliocafé por su amabilidad y toda la organización. 

Y, por supuesto, gracias a Anabel Botella por su generosidad y las increíbles palabras que le dedicó a mis novelas. Gracias por hacerme sentir cómoda, por entenderme y por compartir conmigo ese momento. 

Gracias a todos, siempre, por apoyarme en persona o en la distancia, porque también recibí mucho ánimo a través del móvil y las redes sociales. En fin, que el viernes me fui a dormir con una sonrisa de oreja a oreja. 

Y fue todo por vuestra culpa.